El “Bocha”

Sus inicios -como el de la mayoría de los futbolistas danubianos- fue en las categorías formativas del club de la franja negra. Donde realizó una buena base, en 1964 arrancó en 5ª división, que era la categoría inferior por aquellos años. Entre 1965 y 1966, alternó en 5ª y 4ª división. Precisamente en este último año, conseguía para Danubio, el primer torneo de una 5ª división, al consagrarse Campeón Invicto del “Preparación”.

Con solo 17 años, sus destacadas actuaciones, posibilitaron la convocatoria en 1967 al plantel principal que dirigíaRafael Milans. También, en esa misma temporada es citado para defender la “celeste” en el Sudamericano Juvenil que se disputó en Paraguay, en el que Uruguay no tuvo un buen desempeño.

Quienes lo vieron jugar afirmar que el “Bocha” como le decían todos, era un “5” bastante completo… pretendiéndose decir “una mezcla interesante de temperamento y técnica”. Defendiendo a la Primera división de Danubio debió experimentar dos momentos diametralmente opuestos. La desazón del descenso de 1969 y la inmensa alegría, por el rápido ascenso al siguiente año, en la mejor campaña danubiana en la divisional “B”, obteniendo el 84% de los puntos.

Integró varios equipos franjeados que practicaban un fútbol de alta calidad, teniendo como compañeros a jugadores de la talla de los argentinos Otto Sesana y Ricardo Palma, así como también, “Rafa” Perrone, Gerardo Rodríguez, Horacio Franco, Juan Ascery, etc.

Fue protagonista fundamental en la primera victoria danubiana por el Campeonato Uruguayo frente a Peñarol por 2 goles a 1, allá por 1971, recibiendo de un matutino los siguientes conceptos: “Fútbol de titanes. Corrió toda la cancha. Gran rendimiento”.

Sus condiciones, lo llevaron nuevamente a la Selección Uruguaya, esta vez a la Mayor, defendiéndola desde 1972 hasta su transferencia al exterior en 1974.

Fue titular en todos los encuentros de la Eliminatoria para el Mundial de Alemania ’74, que Uruguay disputó con Colombia y Ecuador; jugando también un partido en el propio certamen mundialista.

En el año 1974, es transferido a Racing de Avellaneda, jugando para los albicelestes hasta fines de 1975, cuando “salta” al fútbol de México. En la tierra del tequila, vistió las casacas del Atlas, Puebla y Monterrey.

Once años después de su alejamiento, retornó en 1985 como ayudante técnico de Roberto Repetto, ex compañero en Danubio y se consagró nuevamente campeón de 5ª división, en esta oportunidad del Campeonato Uruguayo. Aquel fabuloso equipo que integraban: Moas, el “Pompa”, “Gallina” Da Luz, Ruben Pereira y “Pollilita” Da Silva, entre otros….

Varios años después, otro Cardaccio supo vestir con suceso la “5” danubiana, su hijo Víctor Alberto, quien obtuvo varios torneos en las divisiones juveniles, y que luego se fue a jugar a México.

Cardaccio sinónimo de temperamento y técnica al servicio de la Franja. En enero de 2015, el “Bocha” se fue de este Mundo… pero no lo olvidamos.

19 de junio. El día en que el fútbol oriental conquistó al Imperio Británico.

El fútbol uruguayo tiene tanta gloria que no alcanzan los días del año para enumerarlos. Muchos triunfos destacados coinciden en la misma fecha e incluso,  se repiten ante los mismos rivales en casos puntuales.  Uno de ellos coincide en un día muy especial para nuestro país como lo es el 19 de junio. En esa jornada, en la que se conmemora el Natalicio de José Gervasio Artigas, la selección uruguaya conquistó dos victorias trascendentales ante Escocia e Inglaterra por los mundiales de 1954 y 2014 respectivamente. De esta forma, se puede afirmar que ese día, los orientales se impusieron sobre el imperio británico en las lides de la batalla deportiva. 

Llegaron  a cada rincón del planeta con sus conocimientos, sus avances tecnológicos y sus costumbres.  Los capitales radicados en aquellas frías islas del norte de Europa se expandieron por todo el mundo invirtiendo en diferentes emprendimientos industriales  que  transformaron por completo la vida de las sociedades locales en las cuales se instalaron.  Obreros, ingenieros y gerentes trasladaron a sus nuevos destinos el sudor de sus frentes, el arte de sus manos, el valor de sus ideas y sus fines recreativos como forma de cumplir con sus obligaciones laborales y sobre llevar sus horas libres a miles de kilómetros de sus hogares.

Las peculiares atracciones británicas despertaron la curiosidad de los oriundos de esta tierra y el juego del  football, en desmedro  del rugby y del cricket,  fue incorporado rápidamente como un elemento propio  de aquella sociedad de antaño.  Orientales y británicos se enfrentaron desde un principio existiendo diversos  antecedentes de todo tipo en esta materia.  Desde los espontáneos matches en los baldíos de la Punta de las Carretas entre marineros británicos y criollos auto convocados a  las extraordinarias giras sudamericanas  de los poderosos clubes profesionales ingleses que llegaban a estas latitudes para disputar  partidos amistosos ante los nóveles teams locales.  Sin embargo, a nivel de selecciones y luego de una pronunciada evolución de la organización de las competencias futbolísticas, el combinado uruguayo recién enfrentó  a una selección británica a mediados del siglo pasado.  La estadística oficial de la AUF establece que el  primer partido contra Inglaterra por todo tipo de competencia fue el 31 de mayo de 1953 en el Estadio Centenario. Los vigentes tetracampeones del mundo recibieron a los creadores del balompié y les dieron una clase de perfeccionamiento al superarlos por 2 a 1. Este partido tuvo su revancha al año siguiente cuando ambas selecciones se cruzaron por los cuartos de final del Mundial de Suiza. Los uruguayos volvieron a imponerse al equipo de los tres leones por un contundente 4 a 2. En ese mismo torneo, y exactamente una semana antes del citado partido, los celestes también se enfrentaron por primera vez al otro tradicional combinado británico. Uruguay y Escocia jugaron el 19 de junio y nuestros compatriotas desarrollaron otra lección futbolística magistral. Una victoria de ribetes históricos que se dio en una jornada tan especial para el pueblo uruguayo.  

19 DE JUNIO DE 1954. PRIMERA VICTORIA OFICIAL SOBRE EL IMPERIO CREADOR DEL FÚTBOL

Uruguay arribó a Suiza como defensor de la Copa del Mundo de la FIFA y en calidad de invicto en certámenes mundialistas. Juan López seguía al frente de la conducción técnica del equipo nacional y conformó un combinado, que para muchas voces expertas del momento, era mucho más competitivo que el legendario plantel campeón del mundo de 1950.

El torneo más importante del orbe futbolístico  volvía a disputarse en el viejo continente con la participación de 16 selecciones de Europa, América del Sur, América del Norte y Asia. Los representativos nacionales fueron divididos en cuatro grupos y se seleccionaron, de forma arbitraria, dos cabezas de serie que no jugaban entre sí. Tampoco se enfrentaban  entre ellas las otras 2 selecciones restantes de cada serie.  Por lo tanto, cada equipo terminaba jugando dos partidos por el grupo y no tres encuentros como se hace habitualmente. Uruguay integró el grupo 3 junto a Austria, Checoslovaquia y Escocia pero solo jugó contra los 2 últimos países nombrados. El debut celeste se dio el miércoles 16 de junio frente a Checoslovaquia y culminó con triunfo por 2 a 0 con goles de Óscar Miguez a los 72´ y Juan Alberto Schiaffino a los 81´.  El partido fue sumamente parejo pero los campeones lograron doblegar a su rival con absoluta autoridad. Los celestes salvaron con buena nota aquel  debut y aguardaban por Escocia en el marco de un nuevo aniversario del Natalicio de Artigas.

Titular del diario El País del 20 de junio de 1954. Un triunfo contundente

UN TRIUNFO DE “PURO CUÑO URUGUAYO”

Aquel 19 de junio fue sábado y cada fecha patria se vivía como una verdadera fiesta cívica en el país. Los desfiles institucionales  se replicaban en cada pago del territorio nacional mientras que los alumnos de primer año  de educación media juraban fidelidad al Pabellón Nacional en actos públicos y solemnes. Los escolares  también rendían homenaje a la Bandera yendo a sus respectivas fiestas  con túnicas blancas impolutas y moñas azules bien armadas para la ocasión. Se celebraban los 190 años del nacimiento del Prócer y el tradicional festejo estaba acompañado por la expectativa de la afición ante la segunda presentación uruguaya en Suiza.  Aquel día, los programas de las celebraciones patrióticas tuvieron una pausa al mediodía y todo el mundo procuró estar cerca de un receptor de radio sobre las 12:50 hs. El equipo uruguayo era consciente de su potencial pero su rival de turno le profesaba un profundo respeto por su honda tradición futbolística. No eran tiempos de internet ni de análisis de video y la única instancia concreta para sacar apuntes consistía en el partido de los escoceses ante los austríacos. Sin embargo, ese match  se jugó de forma simultánea con el partido de Uruguay vs Checoslovaquia y las principales referencias para conocer al equipo británico resultaron ser las crónicas periodísticas.

Análisis técnico de las delanteras uruguayas y escocesas. La labor periodística era muy completa y los lectores accedían a una información muy detallada en las páginas de los periódicos. Diario El País.

Uruguay llegó al partido con la tranquilidad de haber salido victorioso en su estreno.  Su rival de turno había caído por 1 a 0 ante Austria y requería una victoria urgente si pretendía avanzar de fase. El torneo había generado una repercusión mayúscula en aquellas latitudes y el Saint Jakob Park de Basilea lucía abarrotado con 34 mil espectadores deseosos de ver a los vigentes campeones del mundo. El kick off se dio unos minutos antes de la hora del té y el encuentro culminó siendo un trago amargo para Escocia. Los británicos fueron superados de principio a fin por los  uruguayos y el tablero de madera indicó un aplastante  7 a 0, Un resultado histórico que representó una de las mayores  goleadas del fútbol sudamericano sobre el europeo en la historia de la Copa del Mundo y la segunda más amplia en la rica estadística uruguaya. Tan solo fue superada por el 8 a 0 sobre Bolivia del 2 de julio de 1950 disputado en Belo Horizonte.                                                                                                                               

Aquella tarde primaveral de  Basilea quedó para el mejor recuerdo. Los punteros celestes le ganaron las espaldas a los marcadores escoceses durante todo el partido  y varios goles fueron gestados de forma muy similar. Carlos Borges abrió el marcador a los 17´ y Óscar Míguez anotó el segundo tanto a la media hora de juego. Ambas anotaciones se pueden definir como verdaderos golazos que fueron producto del exquisito juego colectivo uruguayo y de la alta calidad técnica de los dos delanteros mencionados. El resultado parcial del primer tiempo fue 2 a 0 y el técnico escocés Andy Beattie pretendió dar un revulsivo a sus jugadores. Los británicos salieron entonados a disputar el segundo tiempo y  Máspoli evitó el descuento al atrapar  el balón sobre la línea de gol a los pocos segundos de juego. Esa habilidosa acción del afamado arquero oriental fue determinante para el desenlace del juego. Los uruguayos volvieron a tener la posesión del balón al salir desde el fondo y Carlos Borges anotó el tercer gol a los 47´. Desde ese momento hasta el pitazo final, las incidencias del  partido configuraron un auténtico festín celeste. La delantera uruguaya se divirtió en el área escocesa con furibundos desbordes de sus veloces punteros. Julio César Abbadie marcó el cuarto gol a los 54´, Borges anotó su hat trick a los 57´, Míguez facturó su segundo gol en el juego a los 83´ y “El Pardo” cerró el marcador a los 85´ con su segunda conquista personal tras eludir al golero Fred Martin.  El público europeo, al igual que en Colombes y en Ámsterdam, volvía a expresar su admiración al team oriental por otra gran demostración de buen juego.

Captar el momento justo del gol era una de las tareas más complejas del oficio del fotógrafo en aquellos tiempos. Foto: Diario El País.

El resultado produjo una gran alegría en la delegación uruguaya y el sueño de retener el título se potenciaba entre sus integrantes. Uno de los que no pudo esconder su emoción fue el director técnico Juan López. En declaraciones recogidas por Dionisio Alejandro Vera,  enviado del diario El País a Suiza,  el seleccionador nacional dijo que “los muchachos me han dado una gran alegría. No han hecho sino ratificar toda la confianza que en ellos tenía depositada. Cada uno en su puesto cumplió con el trabajo que se le había encomendado y de ese haz de compactas voluntades ha salido  una actuación de conjunto soberbia que ha apabullado a los escoceses”. Y agregó; “este triunfo es de puro cuño uruguayo. Hoy ha relucido la técnica celeste y los aficionados que tuvieron el placer de estar en Basilea han salido convencidos de la capacidad del fútbol nuestro”.  

Óscar Míguez y William Martínez rodean Carlos Borges en señal de reconocimiento al puntero izquierdo. “Lucho fue el goleador celeste en Suiza e integró la oncena ideal del torneo. Foto: Estrellas deportivas, N° 33

Por su parte, una de las grandes figuras de aquella tarde del 19 de junio fue Carlos Borges. “Lucho” anotó un triplete que contribuyó significativamente para culminar integrando  el equipo ideal del certamen.  También conformaron esa destacada oncena sus compañeros Juan Schiaffino y Víctor Rodríguez Andrade. Los uruguayos habían superado a una de las naciones pioneras del fútbol y avanzaban a la siguiente fase. Una semana después, aquellos hidalgos deportistas eliminaron  a los ingleses al vencerlos por 4 a 2 en cuartos de final. La supremacía criolla sobre aquellos europeos era tan grande como la distancia existente entre el Río de la Plata y las Islas Británicas.

Por estos pagos, los festejos por el cumpleaños del Prócer se reanudaron luego del partido con gran algarabía. La fiesta era completa en una patria feliz.

LOS BRITÁNICOS SE RINDEN ANTE EL NUEVO PRÓCER DEL FÚTBOL URUGAYO

La Copa del Mundo volvía a Sudamérica en 2014 en medio de profundas controversias. Un gran porcentaje de la población brasileña manifestaba su disconformidad ante el derroche económico que implicaba la organización del faraónico evento.  Uruguay clasificó al certamen tras ganar el repechaje frente  a Jordania por un resultado global de 5 a 0. Los recuerdos de Sudáfrica estaban intactos en la retina de los aficionados y el “Fantasma del 50” circundaba en el imaginario colectivo de uruguayos y norteños. El proceso Tabárez se encontraba en plena luna de miel con los hinchas a partir de varias actuaciones destacadas de los diferentes seleccionados nacionales. El cuarto puesto en Sudáfrica, ir a dos mundiales seguidos luego de tres décadas, la obtención de la decimoquinta Copa América en 2011, la clasificación a los Juegos Olímpicos de Londres 2012 y las finales del mundo disputadas por la sub 17 en México 2011 y por la sub 20 en Turquía 2013, fueron hechos fundamentales para sellar la reconciliación definitiva entre el equipo nacional y toda la población uruguaya en su conjunto.  La Copa del Mundo volvía a estar muy cerquita en términos geográficos y las reminiscencias del pasado alentaban la ilusión de repetir un segundo “Maracanazo” en tierras cariocas. Asimismo, el auspicioso presente de Edinson Cavani y Luis Suárez en Europa motivaba la ebullición de las gargantas uruguayas para gritar los goles de estos dos grandes delanteros de origen salteño. En el caso específico de Suárez, la actuación de Uruguay en esa Copa del Mundo estuvo determinada  por él desde que comenzó la preparación del equipo hasta el final de su incursión en la competición.

La opinión pública se vio conmovida el 22 de mayo cuando “Lucho” salió en silla de ruedas de la Médica Uruguaya por Avenida Italia. El delantero había sido intervenido quirúrgicamente en su rodilla izquierda y las interrogantes sobre su participación en el máximo evento futbolístico ocuparon las primeras planas de todo el mundo.  Suárez venía de una gran temporada en la Premier League con el Liverpool y las grandes expectativas de la afición estaban colocadas sobre el delantero.  Desde ese día, la selección entrenaba para el mundial mientras Suárez trabajaba de forma ardua con Walter Ferreira para estar en Brasil. Dos desafíos simultáneos que desembocaban en el objetivo común de defender a la gloriosa casaca color cielo.

El sorteo del fixture indicó que Uruguay integrara el grupo D y que su debut se diera el sábado 14 de junio frente a Costa Rica. Uruguay era favorito en la previa y comenzó ganando rápidamente a los 7´ con gol de penal de Cavani. Todo parecía estar bajo control y se presumía que la ausencia de Luis iba a pasar disimulada. Sin embargo, todo salió al revés y el fútbol uruguayo sufrió una de sus peores bofetadas.  Los Ticos, posteriormente considerados como la gran revelación de ese mundial, culminaron venciendo por un contundente 3 a 1.  Esta derrota fue absolutamente inesperada y resultó un golpe muy fuerte a la ilusión.  El rendimiento futbolístico de Uruguay había sido discreto y el fixture indicaba el cruce con Inglaterra. Algo que parecía más difícil sin Suárez.

Tapa del Diario El País del viernes 20 de junio de 2014.

EL LORD CRIOLLO QUE HIZO HISTORIA EL 19 DE JUNIO  

Aquel día fue una tibia jornada de finales de otoño. Era jueves y durante la mañana se habían celebrado los múltiples actos solemnes conmemorativos de los 250 años del Natalicio de José Gervasio Artigas. En el calendario de la selección nacional, se cumplían 60 años de la goleada por 7 a 0 frente a los escoceses en la Copa del Mundo de Suiza. Un dato que pasó absolutamente inadvertido en las vísperas de un nuevo enfrentamiento ante un equipo británico.                   Eran las cuatro de la tarde y el país se detuvo en términos literales. Luis Suárez fue anunciado entre los titulares pero la incertidumbre sobre su rendimiento deportivo estaba presente tras esa repentina operación de meniscos del mes de mayo. A su vez, otra estadística incidía de forma directa en el optimismo de los hinchas con respecto al duro desafío futbolístico. Uruguay llevaba 44 años sin vencer a una  selección europea por la Copa del Mundo tras el inolvidable triunfo ante la URSS por 1 a 0 en México 1970.

El partido era una final para ambos. Los dos combinados nacionales habían perdido en sus respectivos debuts y tenían que ganar para seguir en el torneo.  La base de la selección inglesa pertenecía al Liverpool mientras que la principal figura del equipo de Anfield vestía de color celeste. Los primeros minutos fueron sumamente parejos y los dirigidos por Roy Hodgson casi abrieron el marcador en dos ocasiones. Momentos de zozobra que paralizaron los corazones uruguayos por breves instantes. Las acciones se fueron equiparando en el terreno de juego  y sobre el minuto 38 comenzaba a gestarse el primer acto de la memorable epopeya. La pelota llegó a Cavani sobre el extremo izquierdo del ataque y Edinson levantó un centro perfecto a su compañero de ataque. Suárez le ganó la espalda a Gary Cahill y con un suave toque de cabeza, colocó la pelota sobre el palo derecho de Hart.  El corpulento goalkeeper inglés hizo su máximo esfuerzo pero el mismo resultó inútil para evitar la conversión. El primer grito de gol resonaba bien fuerte en el territorio nacional, en San Pablo y en cada rincón del planeta donde había un uruguayo. Suárez, el goleador de la Premier, el que había sido suspendido por supuestos dichos racistas contra el francés Evra, el que se había operado hace menos de un mes de una de sus rodillas, abría el marcador en la épica jornada.

Primer gol de Suárez. Primer acto de una epopeya única en la historia de los mundiales. Foto: Diario El Pías

El primer tiempo culminó 1 a 0 y se aguardaba una segunda mitad apasionante. Las acciones siguieron siendo sumamente parejas pero el temido empate llegó. Wayne Rooney se metió con absoluta displicencia entre los zagueros  y con un simple toque anotó el gol inglés. 1 a 1 y tan solo faltaban 16 minutos para terminar el encuentro.  Tabárez, fiel a su estilo, no asumió mayores riesgos en el diseño táctico y solo remplazó a Álvaro González por Jorge Fucile. No parecía ser el cambio más adecuado según los requerimientos del partido y de la tabla de posiciones del grupo pero, cada maestro conoce como pueden responder sus alumnos en situaciones extremas.                                                                              Corría la vuelta número 84 del reloj y Muslera efectuó saque de meta que superó el círculo central. Cavani saltó bien alto y con absoluta precisión bajó el balón hacia Suárez con su cabeza. Luis ingresó al área con pelota dominada y  lanzó un tremendo zapatazo que sacudió la red de la valla inglesa. Un potente misil imposible de atajar para Hart y veinte arqueros más. Un golazo como  los que marcaron Borges o de Míguez sesenta años antes frente a los escoceses.

El juez dio por finalizado el partido y la transmisión oficial enfocó a Suárez. El salteño era elevado por sus compañeros como símbolo de victoria.  Cuando bajó de los hombros de uno de ellos, acudió a saludar a Steven Gerard. Rival de turno en esta instancia pero su capitán en los “Reds”. Luego, vendría el partido contra Italia, la supuesta mordida y la insólita sanción por parte de los moralistas de la FIFA. Ese hecho fue crucial en el desenlace de la actuación uruguaya en Brasil. El equipo  no pudo sobrellevar el golpe anímico que representó la expulsión de Suárez de territorio brasileño como si fuera un peligroso delincuente. Uruguay  quedó eliminado el 28 de junio ante Colombia al perder por 2 a 0 en octavos de final.

Aquel 19 de junio de 2014, el pueblo uruguayo culminó el cumpleaños de Artigas con la enorme felicidad de la histórica victoria ante Inglaterra. Sesenta años antes, los orientales también habían festejado un triunfo resonante frente a los escoceses. Cosas peculiares que tienen nuestro fútbol y nuestra patria.  

URUGUAY 7 ESCOCIA O Fecha: 19 de junio de 1954. 16:50 hs local Estadio: Saint Jakob Park, Basilea, Suiza. Jueces: Vincenzo Orlandini (ITA), Paul Wyssling (SUI) y Denilo Guidi (SUI).

URUGUAY: Roque Máspoli, José Santamaría, William Martínez, Víctor Rodríguez Andrade, Obdulio Varela, Luis Cruz, Julio César Abbadie, Javier Ambrois, óscar Míguez, Juan Schiaffino, Carlos Borges. DT: Juan López.

ESCOCIA: Fred Martin, Willie Cunningham, Jock Aird, Tommy Docherty, Jimmy Davidson, Doug Cowie, Johnny Mckenzie, Willie Fernie, Neil Mochan, Allan Brown, Willie Ormond. DT: Andy Beattie.

Goles: Carlos Borges (17´, 47´ y 57´), Óscar Míguez (30´ y 83´) y Julio C. Abbadie (54´ y 85´).

URUGUAY 2 INGLATERRA 1. Fecha: 19 de junio de 2014. 16:00 hs local. Estadio: Arena Corinthians, San Pablo, Brasil. Jueces: Carlso Velasco (ESP), Roberto Alonso (ESP), Juan Yuste (ESP). Cuarto árbitro: Alireza Faghani (IRN). Quinto árbitro: Hassan Kamranifair (IRN).

URUGUAY: Fernando Muslera, Martín Cáceres, José María Giménez, Diego Godín, Álvaro Pereira, Álvaro González (Jorge Fucile 77´), Egidio Arévalo Ríos, Cristian Rodríguez, Nicolás Lodeiro (Cristhian Stuani 66´), Luis Suárez (Sebastián Coates 86´), Edinson Cavani. DT: Óscar W. Tabárez.

INGLATERRA: Joe Hart, Glen Johnson, Gary Cahill, Phil Jagelka, Leighton Baines, Steven Gerard, Jordan Henderson, Raheem Sterling (Ross Barkley 64´), Wayne Rooney, Danny Wellbeck (Adam Lallana 70´), Daniel Sturridge. DT: Roy Hodgson.

Goles: Luis Suárez (38´ y 84´). Wayne Rooney (74´).

Estadística URUGUAY vs ESCOCIA. PG 2, PE 1, PP 1. 10 goles a favor y 4 goles en contra.

Estadística URUGUAY vs INGLATERRA. PG 5, PE 3, PP 3. 15 goles a favor y 11 goles en contra.

A Guillermo Escalada

Guillermo Escalada (foto: atilio.uy)

Debo reconocer que me cuesta escribir estas líneas cuando en ellas me voy a referir a alguien que tuve el placer de conocer, disfrutando de su don de gentes y de su sencillez.

Y me cuesta también resumir en unos pocos párrafos lo que significó este hombre para su querido Nacional, al cual le brindó sus mejores esfuerzos, obsequiándonos a los hinchas con un montón de goles y emociones.

De origen humilde, se fue a probar con los “tarros” envueltos en papel de diario a la vieja cancha de Propios y Marne, donde Ithurbide y el “cabezón” Romero le daban el “si” o le bajaban el pulgar a cada uno de los casi 300 aspirantes que se presentaban al llamado publicado en la prensa.

Seguir leyendo…

Los mundiales sub 20. Una colección de gratos recuerdos más allá de no dar la vuelta.

Un nuevo sueño mundialista  comienza  para el ´futbol juvenil celeste. Los seleccionados menores de 20 años participarán de la Copa Mundial organizada por la FIFA de forma emergente en la vecina orilla. El torneo se iba a desarrollar en Indonesia pero diferentes motivos políticos llevaron al ente rector del fútbol internacional a cambiar la sede del evento. La selección Argentina había quedado eliminada de la competición pero la hábil gestión del presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), Ricardo “Chiqui” Tapia, determinó que la albiceleste culminara con la fiesta en su casa. AFA ofreció rápidamente albergar el torneo y que su seleccionado ocupara el lugar de anfitrión que liberó Indonesia. De esta forma, el fútbol argentino buscará conseguir su séptima conquista en esta categoría y continuar con la algarabía generada por el éxito obtenido en Catar por el equipo nacional absoluto. Los jóvenes charrúas fueron protagonistas fundamentales del último campeonato sudamericano sub 20 y terminaron en el segundo puesto tras caer por 2 a 0 ante Brasil en el partido decisivo del hexagonal final. La Celeste fue mucho más competitiva que el equipo argentino y llega con un mayor favoritismo aunque nos cueste reconocerlo.

Asimismo, esta participación constituye la primera vez en la historia en que una selección uruguaya de fútbol jugará un campeonato del mundo en suelo argentino. La selección mayor quedó fuera del Mundial de 1978 mientras que la sub 20 tampoco pudo ir a Argentina  cuando se celebró su máximo certamen en  2001.   En la mayoría de los países del orbe futbolístico, los torneos juveniles generan un impacto menor que el de las competencias de adultos. Sin embargo, la pasión futbolera  oriental determina que los campeonatos sub 20 despiertan alegrías y decepciones similares a la de cualquier otro torneo de relevancia de mayores. Los hinchas conservan en su memoria notables actuaciones que desempeñaron los jóvenes futbolistas a lo largo del tiempo. Momentos destacados, que pese a no haber culminado con la obtención de un campeonato mundial, dejaron su huella en nuestra idiosincrasia futbolera. Vale la pena mirar hacia atrás para hacer un repaso  en las horas previas al debut mundialista.

1979 La copa vino para el Río de la Plata pero se quedó en la vecina orilla.

Mundial sub 20 - Japón 1979 - AUF
Uruguayos y argentinos presentaban dos grandes combinados.
El resultado nos terminó siendo esquivo. Imagen: auf.org.uy

El primer mundial Sub 20 se disputó en Túnez en 1977 y representó una verdadera novedad. La FIFA acentuaba su voraz expansión globalizadora con la creación de productos que pudieran comercializar nuevos derechos televisivos, acrecentar el número de empresas patrocinadoras y aumentar de forma significativa el número de consumidores del fútbol como una mercancía de entretenimiento. Es por ello, que comenzaron a disputarse los mundiales juveniles en diversos países con poca o nula tradición futbolística. África, Oceanía y Asia (principalmente Japón) fueron las tierras a conquistar para que el negocio generara cada vez mayores divisas.

Los gorriones celestes obtuvieron el tricampeonato sudamericano en 1979 y emprendieron el viaje hacia Japón para ser los mejores del mundo entre los de su generación.  Los estrepitosos fracasos deportivos de la selección mayor en 1974 y 1978 determinaron que las exitistas expectativas de los hinchas estuvieran puestas en las promesas de nuestro fútbol.  La Celeste había culminado en el cuarto puesto en la edición inaugural de 1977 y el sueño de ganar el mundial estaba intacto. Uruguay aterrizó en Japón y tuvo un comienzo arrasador. Obtuvo el primer puesto de su grupo ganando 5 a 0 a Guinea (Molina 7´, Revelez 22´y 74´; Paz 53´ y Vargas 76´), 2 a 0 a Hungría (Paz 23´ y  Vargas 35´) y 1 a 0 a la Unión Soviética (Martínez 66´). Con 3 victorias contundentes y sin goles en contra, la Celeste pasó a cuartos de final  para enfrentar a Portugal. El seleccionado luso fue un duro adversario pero logró ser superado por 1 a 0 con gol de Ruben Paz a los 4 minutos del alargue. Por su lado, Argentina seguía avanzando en el cuadro del torneo y ambos hermanos rioplatenses se toparon en semifinales.  Los albicelestes tenían un verdadero cuadrazo que contaba con el magistral Diego Armando Maradona y un centrodelantero letal como Ramón Díaz. Ambos futbolistas referidos fueron los autores de los 2 goles que determinaron el resultado final por 2 a 0.  El sueño se había esfumado en la tierra del sol naciente pero los gurises culminaron en el podio tras ganarle a Polonia por penales en el cotejo por el tercer puesto. Argentina culminó siendo campeón del mundo al superar a la Unión Soviética por 3 a 1.

1981. Otro tropezón que no fue caída de una generación excepcional.

Mundial sub 20 - Australia 1981 - AUF
La eliminación fue inesperada pero el fútbol juvenil uruguayo
seguía en lo más alto del continente sudamericano. Imagen: auf.org.uy

El fútbol juvenil uruguayo  ocupaba un lugar hegemónico en el continente y así lo demostró en la cancha. El 8 de marzo de 1981 se coronó tetracampeón sudamericano tras golear por 5 a 1 a Argentina sobre la línea imaginaria que divide al mundo en 2 hemisferios. Los nóveles jugadores uruguayos debían volver a cruzar el globo y desplazarse hasta Australia para disputar la tercera edición de la copa del mundo. La lista de buena fe uruguaya estaba repleta de cracks que culminaron desarrollando destacadas trayectorias deportivas. Los gurises, al igual que sus antecesores de 1979, comenzaron de gran forma tras ganarle a Estados Unidos por 3 a 0 (López 7´, Aguilera 60’ y Da Silva 67’), a Polonia 1 a 0 (Da Silva 58’) y  a Catar por 1 a 0 (Villazán 52’). Una vez más, se obtenía la primera posición del grupo venciendo en los 3 partidos y sin recibir goles en contra. Pero la suerte le fue nuevamente esquiva al equipo oriental tras el cruce con Rumania en cuartos de final. El seleccionado de Europa Oriental fue ampliamente superado por aquellos chiquilines uruguayos en el campo de juego pero los rumanos fueron más efectivos y terminaron ganando por 2 a 1 (Berrueta 60´). Esta nueva derrota coincidió en el tiempo con la eliminación de la selección mayor del mundial de España. No eran buenos tiempos para la entrañable Celeste en materia de resultados deportivos.

1993 El Gol de Oro y la “puerta sagrada”.

Mundial sub 20 - Australia 1993 - AUF
Los chiquilines del 93 jugaban muy bien al fútbol. Foto: auf.org.uy

La Celeste pintaba bien en aquel mundial con una generación de futbolistas lideradas por Fabián O´Neill.  El mundial sub 20 volvía a celebrarse en Australia y Uruguay se impuso en el grupo tras empatar con Ghana 1 a 1 (Correa 22´) e imponerse a  Portugal por 2 a 1 (O´Neill 8´ y 87´) y a Alemania por igual score (López 2´ y Correa 65´). El fixture de cuartos de final indicó el enfrentamiento con la selección anfitriona pero el principal rival uruguayo terminó siendo la modificación reglamentaria denominada Gol de Oro.  Lo que se conoció siempre en  el campito como “el que hace el gol gana”.  Uruguay se adelantó en el marcador con un gol de Sergio Sena a los 21´ de juego mientras que Agostino igualó sobre los 60´. El partido culminó empatado y se pasó a la prórroga con la nueva regla en funcionamiento. Fue así, que a los 99´, el chico Carbone marcó el segundo gol australiano y sentenció la suerte uruguaya. Los jugadores orientales se quejaron de diferentes fallos arbitrales de forma enérgica y el enojo del plantel continuó en el vestuario con algunos destrozos de las instalaciones. Entre ellos, el de la puerta de ingreso al camarín. La moralizante FIFA decidió aplicar una sanción ejemplarizante y prohibió la participación de la AUF en la edición posterior de 1995 que se realizó en Catar.

1997. La esperanza que renació con el sol malayo.

1997 Malasia - AUF
Oncena titular del equipo que volvió a unir a la afición con la Celeste. Foto: auf.org.uy

Aquellos tiempos no eran fáciles para el fútbol uruguayo. La selección mayor había ganado su Copa América N° 14 en 1995 pero la clasificación a Francia estaba prácticamente perdida. La sub 20 retornaba a la copa del mundo y volaba rumbo a Malasia en busca de un nuevo sueño. La delegación partió en absoluto silencio y los primeros partidos contaron con escasa audiencia debido a la diferencia horaria. El elenco dirigido por Víctor Púa ganó su grupo al vencer por 3 a 0 a Bélgica (Podestá 41´, Coelho 56´ y 79´), 3 a 1 a Malasia (Zalayeta 24´´, Hayed OG 39´ y López 77´) y empatar con Marruecos 0 a 0. Aquellos chiquilines jugaban bien de verdad y el partido por octavos de final fue fundamental para amalgamar la comunión de los hinchas con la selección como no sucedía hace mucho.  En ese encuentro, la joven Celeste  venció  a Estados Unidos por un aplastante  3 a 0 (Zalayeta  24´ y 34´ y Olivera 41´) con una demostración e alto nivel técnico que pocas veces se observó por estas latitudes.

El torneo seguía su curso y la fuerte selección francesa era el rival de  turno.  Los gurises volvieron a desencadenar la algarabía de la población en su conjunto tras eliminar al combinado europeo en la definición por penales. David Trezeguet, campeón del mundo de mayores al año siguiente, adelantó a los galos en el marcador pero Nicolás Olivera marcó el empate a los 68´. El cotejo continuó igualado y la Celeste se impuso por un dramático 7 a 6 en la definición por penales. Un desenlace agónico que fue la antesala del inolvidable partido ante Ghana por semifinales.  Aquel inolvidable match comenzó con una tempranera anotación de Zalayeta a los 13´ y continuó con un segundo gol de Coelho sobre las postrimerías del primer tiempo. Uruguay se fue al entretiempo con un cómodo 2 a 0 pero la ventaja se diluyó en poco más de media hora. El partido fue a la prórroga y en esta ocasión, al contrario de lo sucedido en 1993, Uruguay pudo sacar ventaja del controvertido  Gol de Oro. El lateral derecho Fabián Perea se vistió de centrodelantero y convirtió a los 105´ el memorable tanto que dio por finalizado el partido y selló el pasaje a la final. 

El fútbol criollo volvía a disputar un partido de estas dimensiones enfrentando a su histórico rival rioplatense como en 1928 y 1930. Aquel partido detuvo al país en términos literales y el golazo de tiro libre de Pablo García resonó en todo el territorio nacional a los 15´ de juego. Los dirigidos por Pekerman, en su calidad de defensores del título, se fueron al ataque y lograron darlo vuelta con los tantos anotados por Cambiasso (26´) y Quintana (43´). El resultado culminó siendo adverso y Argentina levantó la copa. Nicolás Olivera fue reconocido con el Balón de Oro mientras que Marcelo Zalayeta lo escoltó con el Balón de Plata. Asimismo, también es recordado con enorme estima el botija  Perea tras perder la vida en un siniestro de tránsito en Propios y Canstantt durante una madrugada de octubre de aquel mismo año.  Aquellos chiquilines que se  fueron en silencio a Malasia culminaron siendo recibidos como verdaderos campeones.  La ilusión de los aficionados se había teñido de celeste nuevamente.                                                                                         

El  proceso juvenil conducido por Víctor Púa continuó con una muy buena participación en Nigeria 1999, Uruguay finalizó en cuarta posición tras eliminar a Brasil por 2 a 1 en cuartos de final y presentó  una nueva generación de notables futbolistas  liderada por Diego Forlán.

El proceso Tabárez y su impacto en la selección juvenil.

Mundial sub 20 - Turquía 2013 - AUF
En Turquía 2013 se venció por primera vez a España en un torneo oficial por toda categoría. Foto: auf.org.uy

El período posterior a Púa estuvo marcado por los malos resultados. Uruguay quedó afuera de 3 mundiales consecutivos (2001. 2003 y 2005) y volvió al certamen con la llegada del Maestro Tabárez. La Celeste viajó a Canadá 2007 con una gran cantidad de gurises que pintaban para bien. Suárez, Cavani, Cardaccio, Cáceres fueron algunos de quienes  integraron la nómina de aquel destacado seleccionado que fue eliminado de forma sorpresiva en octavos de final. Desde ese momento, la selección sub 20 fue a todas las ediciones de la copa del mundo hasta el presente aunque su suerte fue sumamente dispar.  En 2013, los gorriones uruguayos volvieron a protagonizar una gran actuación llegando a la final del torneo disputado en Turquía.  La selección de Verzeri demostró un aceptable nivel de juego y consiguió resultados históricos. Uno de ellos, que pasó inadvertido para la mayoría de la opinión, consistió en conseguir la primera victoria oficial sobre España en toda categoría. El triunfo frente a la Roja fue por 1 a 0 con gol de Felipe Avenatti a los 109´ de juego y significó el pase a la semifinal frente a Irak. La Celeste llegó a la final y enfrentó a un extraordinario equipo francés dirigido en la cancha por Pogba. El partido terminó igualado sin goles y los galos vencieron en la definición  por penales. Nicolás López fue uno de los goleadores de la competición mientras que Guillermo De Amores obtuvo el premio de Guantes de Oro por ser considerado el mejor arquero.

Una nueva historia comienza a escribirse en La Plata. Los jóvenes defensores de la gloriosa casaca celeste serán los primeros futbolistas en jugar un mundial en nuestro querido país vecino. Los uruguayos son expertos en arruinar las fiestas que organizan los anfitriones y esto, los argentinos, lo saben muy bien.

Actuaciones de Uruguay en los mundiales sub 20

Túnez 1997 Cuarto puesto Japón 1979 Tercer puesto Australia 1981 Cuartos de final México 1983 Cuartos de final Rusia 1985 No clasificó Chile 1987 No clasificó Arabia Saudita 1989 No clasificó Portugal 1991 Fase de grupos Australia 1993 Cuartos de final Catar 1995 Suspendido Malasia 1997 Subcampeón Nigeria 1999 cuarto lugar Argentina 2001 No clasificó Jordania 2003 No clasificó Países Bajos 2005 No clasificó Canadá 2007 Octavos de final Egipto 2009 Octavos de final Colombia 2011 Fase de grupos Turquía 2013 Subcampeón Nueva Zelanda 2015 Octavos de final Corea del Sur 2017 Cuarto lugar Polonia 2019 Octavos de final

Un Timonel en el Danubio

Una zurda prodigiosa, la cabeza levantada, creación y prestancia son solo algunas de las tantas virtudes de este exquisito “10”.

Sergio Santín nació en el departamento de Salto el 6 de agosto de 1956 y el apodo de “Bocha” se lo ganó desde muy pequeño porque pasaba todo el día detrás de la bocha o pelota.

Su historia futbolística comenzó en el Club Atlético Universitario de su ciudad natal, para luego desembarcar en Danubio. Con la franja negra en el pecho debutó en 1977, defendiéndola en alrededor de 130 partidos.

Desde su botín izquierdo “dibujaba” sobre la cancha las mejores jugadas, con gran sutileza y precisión en la pegada para habilitar a los atacantes. Inteligente y rápido mentalmente, con pelota dominada era infalible. Además, fue un notable definidor.

Cuanto más difícil el partido… el “Bocha” aumentaba su nivel y protagonismo, esto lo transformó en ídolo indiscutido de los hinchas danubianos.

Con el club de la Curva de Maroñas, fue subcampeón de la Liguilla ´77, logrando la histórica primera clasificación danubiana a la Copa Libertadores de América, tras vencer a Nacional en finalísima.

En 1978 obtuvo el Balón de Oro a la “revelación” del fútbol uruguayo, premio que otorgaba el desaparecido diario “El Día”.

También integró el plantel que obtuvo el vice campeonato en el Torneo República disputado en 1979.A mediados del año 1980, fue transferido al fútbol colombiano, donde también brilló por más de una década. Aún hoy, es dueño de un récord que no ha sido superado, es el futbolista con mayor cantidad de goles mediante la ejecución de tiros penales, con nada menos que 64. En total disputó 451 encuentros y marcó 119 goles, defendiendo a los clubes Deportivo Pereira, Cúcuta, Atlético Nacional, América de Cali y Once Caldas. En la temporada 1984 -1985 jugó en Peñarol y en 1986 en el Santos brasileño.

Sus cualidades le permitieron alcanzar la selección mayor de Uruguay, con la cual disputó 18 partidos. Roque Máspoli lo hizo debutar (siendo jugador de Danubio) en 1980, en un amistoso frente al seleccionado peruano. Seis años después, convocado por el Profesor Omar Borrás, defendió la casaca celeste en el Mundial de México de 1986, jugando todos los partidos.

Tras finalizar su prodigiosa carrera como futbolista se recibió de entrenador y por algún tiempo trabajó en equipos colombianos, para luego integrarse al Cuerpo Técnico de su amigo Ricardo Gareca.

Sergio Santín, como lo definiera un periódico, fue… “UN TIMONEL EN EL DANUBIO”.

 

¿Quiénes serán los sucesores de Luis Suárez y Edinson Cavani?

La Copa del Mundo QATAR 2022 nos dejó a los uruguayos unos cuantos sinsabores. Además de la prematura eliminación en la fase de grupos, hay que agregarle el hecho de que La Celeste probablemente le haya dicho “adiós” a varios jugadores icónicos dentro de la selección nacional. Los últimos representantes de la “generación de SUDÁFRICA” que integraron el plantel charrúa en el último Mundial fueron Fernando Muslera, Diego Godín, Martín Cáceres, Edinson Cavani y Luis Suárez.

“El Nene” debutó por Eliminatorias en Quito, cuando el 10 de octubre de 2009 el equipo dirigido por Oscar Tabárez derrotó a ECUADOR por 2-1. De allí en más, el jugador nacido en Buenos Aires se adueñó de la valla oriental y acumuló 133 presencias. Diego Godín ha sido un bastión en la zaga de URUGUAY, heredando el brazalete de capitán que ostentaba Diego Lugano. “El Faraón” tiene el récord de presencias con la casaquilla color cielo, la cual vistió en 161 oportunidades. Además, marcó 8 goles, cinco de ellos en partidos oficiales. El más recordado tuvo lugar en la Copa Mundial BRASIL 2014, para la victoria por 1-0 sobre los italianos. Otro tanto destacado fue el convertido ante BOLIVIA, por las Eliminatorias camino a RUSIA 2018. Ese día La Celeste se impuso por 2-0, siendo el único triunfo oficial en la altura de La Paz.
“El Pelado” Cáceres se destacó por su versatilidad para ocupar los cuatro puestos de la línea final y sumó 116 encuentros con el combinado nacional. Un hito recordado del defensa surgido en Defensor Sporting fue la conversión del penal decisivo para que URUGUAY eliminara a la selección argentina de su propia Copa América, en el año 2011.

Sin embargo, los grandes emblemas de esta última década han sido los delanteros por excelencia que ha tenido el elenco oriental. Luis Suárez y Edinson Cavani realmente han marcado una época, siendo una dupla temible para cualquier rival. “El Pistolero” es el máximo goleador de la selección uruguaya con 68 goles en 137 partidos disputados. Mientras que “El Matador”, con tan solo un juego menos que su compañero, logró marcar en 58 ocasiones. Entre ambos, acumulan 70 goles en las competencias más importantes como lo son la Copa del Mundo, la Copa América y las Eliminatorias de CONMEBOL. Suárez marcó 7 goles en Mundiales y 7 en el máximo torneo continental, no obstante, su producción en las clasificatorias ha sido notable, al punto tal de convertirse en el máximo goleador de la historia del certamen con 29 conquistas, una más que las conseguidas, por ejemplo, por Lionel Messi. Por su parte, las marcas de Cavani son de 18 goles por Eliminatorias, 5 en Copas del Mundo y 4 en Copas América.

Lo cierto es que hay muchos datos más para compartir sobre estos dos fenómenos que Salto vio nacer, pero no es el propósito de este artículo. El mismo pretende justamente hablar sobre el futuro del ataque celeste y lo que vendrá, ya que no se vislumbran con nitidez a los posibles reemplazantes de estos baluartes de la ofensiva, y esto podría representar un problema para URUGUAY.
Durante estos años del “reinado de los salteños” no hubo jugadores que pudieran discutirle la titularidad. En los últimos tres lustros tuvieron la posibilidad de alternar distintos delanteros como Sebastián Abreu, Carlos Bueno, Sebastián Fernández, Cristhian Stuani, Abel Hernández, Jonathan Rodríguez, Diego Rolan, Maximiliano Gómez, Darwin Núñez y Agustín Álvarez Martínez.
Por supuesto, un caso aparte es el de Diego Forlán, que fue otra estrella ofensiva e indiscutida en el seleccionado oriental, coronándose Campeón de América en 2011 y recibiendo el Balón de Oro como el Mejor Jugador de la Copa Mundial SUDÁFRICA 2010.

En definitiva, la propuesta es repasar una lista de posibles futbolistas que puedan cubrir el puesto de centro-delantero o “punta” neto, como se denomina en la actualidad, para sustituir a la dupla Cavani-Suárez.

Darwin Núñez (23 años – Liverpool FC)

Es, a priori, el delantero con mejor inserción en el ámbito internacional y firme aspirante a ser titular con La Celeste. Luego de tener exitosos pasajes por el club Almería y por un equipo grande de PORTUGAL como el Benfica, el artiguense recaló en la Premier League para defender los colores del Liverpool. Si bien es cierto que tal vez se esperaba mucho más de él y la adaptación al medio no ha sido rutilante, sus números no son para nada malos. En 23 juegos por la liga inglesa ha señalado 8 goles, a los que debemos sumar otros cuatro por la UEFA Champions League, uno por la FA Cup y otro por la Community Shield.
El 15 de octubre de 2019 y luego de una buena participación en el Mundial Sub 20 de POLONIA donde marcó dos goles, Núñez hizo su debut en la selección absoluta, marcando el gol del empate en un amistoso celebrado en Lima enfrentando a PERÚ.
Luego tuvo participación en las Eliminatorias y en el Mundial de QATAR, donde no pudo cumplir con las expectativas, como la mayoría del equipo. En total, el delantero lleva 16 partidos con URUGUAY y 3 goles. Obviamente, los aficionados orientales esperamos que lleguen muchos más en el futuro inmediato.

Maximiliano Gómez (26 años – Trabzonspor)

Es uno de los delanteros netos que en los últimos años ha emergido con fuerza, aunque no ha logrado explotar en la selección. Su mejor momento fue en el Celta de Vigo, donde marcó 31 goles en 75 partidos en un lapso de dos temporadas. Luego permaneció por tres años en el Valencia, pero sin el mismo éxito, acumulando 22 tantos. Hace seis meses fue adquirido por el Trabzonspor de TURQUÍA, donde se desempeñan el español Marc Bartra, el eslovaco Marek Hamsik (cuñado y ex compañero de Walter Gargano en el Nápoli) y el egipcio Trézéguet.
Un punto a favor es que, a pesar de haber jugado sólo 921 minutos, cuenta con vasta experiencia en URUGUAY, ya que el sanducero integró los planteles de los dos últimos Mundiales y Copas América. Los minutos señalados los acumuló en 31 partidos, donde logró marcar tres goles; siendo uno solo por partidos oficiales: fue el tanto del triunfo contra CHILE (2-1) en el comienzo del proceso de clasificación para el último Mundial.

Jonathan Rodríguez (29 años – Club América)

El floridense debutó con la selección mayor el 10 de octubre de 2014, en partido amistoso desarrollado en Jeddah, ante ARABIA SAUDITA (1-1). Integró los planteles de URUGUAY en las Copas América 2015, 2019 y 2021, además de participar en las dos últimas Eliminatorias. Sin embargo, no quedó en la lista definitiva para ninguna Copa del Mundo. Es uno de los jugadores que, al parecer, ha dejado pasar el tren con La Celeste, ya que no supo aprovechar sus oportunidades. Veremos si en este nuevo proceso que comienza será tenido en cuenta.
Se ha desempeñado mayoritariamente en MÉXICO, con pasajes por el Cruz Azul, Santos Laguna y actualmente se encuentra en filas del América. A lo largo de su carrera por los diferentes clubes que defendió ha sumado 126 goles en 330 partidos.

Martín Satriano (22 años – FC Empoli)

Este ariete surgido en las canteras del Club Nacional de Football integró la nómina de 55 reservados de cara a lo que fue la última Copa del Mundo. Sólo tomó minutos en uno de los amistosos de preparación ante CANADÁ, jugando media hora de ese encuentro. Satriano pertenece al Internazionale de Milán y actualmente se encuentra a préstamo en el Empoli. También tuvo un pasaje en el Brest de la liga francesa y su mejor versión se vio en el Inter Primavera, filial juvenil del elenco milanés donde anotó 16 goles en 37 partidos. A mitad de año debería volver al equipo dueño de su ficha, que cuenta con delanteros de fuste como Romelu Lukaku, Lautaro Martínez, Joaquín Correa y Edin Dzeko.

Agustín Álvarez Martínez (21 años – Sassuolo)

El “Canario” tuvo un espectacular desempeño en el año 2021, logrando el título de Campeón Uruguayo con Peñarol y consagrándose como goleador de la Copa Sudamericana. Ese rendimiento lo llevó a la selección mayor, en un momento donde Suárez y Cavani no estaban disponibles. El 5 de setiembre de ese año debutó por las Eliminatorias ante BOLIVIA en el Campeón del Siglo, estadio que conocía a la perfección. El 9 marcó uno de los cuatro tantos de la victoria celeste frente a la selección del Altiplano. Después participó de tres encuentros más por ese certamen y perdió pie en la pelea por meterse en la nómina definitiva para la Copa Mundial.
En julio de 2022 fue negociado al conjunto italiano del Sassuolo, que pagó 12 millones de euros por sus servicios, ofreciéndole al jugador nacido en San Bautista un contrato de cinco años. En el elenco verdinegro ha tenido poca continuidad, sumando 299 minutos y convirtiendo un solo gol.

Nicolás López (29 años – Tigres UANL)

Hace unos años atrás cierta parte de la afición le reclamaba al “Maestro” Tabárez que convocara al “Diente” López, futbolista que fue subcampeón mundial a nivel Sub 20 en el año 2013 y recibió el Balón de Plata en aquel torneo celebrado en TURQUÍA. Sin embargo, este delantero aún no ha tenido su chance con la camiseta de la selección mayor. Fue citado por Diego Alonso para las últimas fechas de la Eliminatoria camino a QATAR e integró la pre-selección, quedando finalmente al margen del plantel mundialista. Su pico más alto de rendimiento lo tuvo en su club actual, Tigres de MÉXICO, donde tiene un registro de 25 goles en 86 partidos. A su vez, pasó por el fútbol italiano y por el Internacional de Porto Alegre donde llegó a jugar 114 partidos, logrando señalar 24 dianas. En la presente temporada ha tenido pocos minutos, ya que el francés André Pierre Gignac viene actuando como centro-delantero. Recientemente se dio un cambio de entrenador en el conjunto de Nuevo León, arribando el uruguayo Robert Siboldi como director técnico. Ya veremos si en los planes del nuevo estratega entra Nico López, para que cobre mayor protagonismo y recupere posibilidades pensando en La Celeste.

Matías Arezo (20 años – Peñarol)

El club Granada adquirió en enero de 2022 a este futbolista de origen darsenero, pero tampoco fue tenido en cuenta por el equipo español. Apenas sumó 409 minutos y pudo anotar un gol con la escuadra rojiblanca. En este semestre retornó al URUGUAY, llegando a préstamo para defender a Peñarol. Con los aurinegros ya lleva 11 goles (tres de ellos por Copa Sudamericana), demostrando que su calidad goleadora sigue intacta. Este resurgir puede relanzar su carrera en Europa, dado que su contrato con el Granada es hasta junio de 2026. Su desempeño actual ya está dando sus frutos pensando en integrar la selección, pues Marcelo Broli lo llevó a la reciente mini gira por el continente asiático a fin de participar de los últimos amistosos de La Celeste, donde sumó 30 minutos en el triunfo ante COREA DEL SUR.

Álvaro Rodríguez (18 años – Real Madrid)

El hijo de Daniel “Coquito” Rodríguez, nacido en Palamós (ESPAÑA), se vistió de celeste en el último Campeonato Sudamericano Sub 20, donde marcó 5 goles que contribuyeron a la clasificación al Mundial y al subcampeonato obtenido por el equipo dirigido por Marcelo Broli.
Se ha desempeñado básicamente en el Real Madrid Castilla, filial del conjunto merengue. No obstante, Carlo Ancelotti ya le ha dado minutos en el equipo principal, tanto en La Liga como en la Copa del Rey. Y “El Toro” respondió en las redes el pasado 25 de febrero, nada más y nada menos que en el derbi de Madrid. El espigado ariete de 1,93 metros de altura puso el agónico tanto del empate frente al Atlético, que estuvo a punto de imponerse en el Santiago Bernabeu. He aquí una de las grandes esperanzas orientales de cara al futuro.

Luciano Rodríguez (19 años – Liverpool)

Se trata de un futbolista que impactó en el Campeonato Sudamericano Sub 20 por su pegada y movilidad, adaptándose a jugar por todo el frente de ataque. Los negriazules de Liverpool negociaron con el club Progreso por un precio bajo, considerando el potencial de este jugador (abonaron USD 500.000). La transacción se hizo previo al inicio del torneo continental, donde indudablemente Rodríguez se cotizó al alza. Y todavía queda observar su desempeño en la Copa Mundial, que finalmente se disputará en ARGENTINA. Al igual que “El Toro” Rodríguez, anotó cinco goles en el certamen juvenil. Aquí hay “buena madera para seguir tallando” y en definitiva soñar con tener un delantero de élite.

Felipe Avenatti (29 años – KV Kortrijk)

Un delantero potente, de 1,97 metros de altura, que supo ser subcampeón mundial a nivel Sub 20 hace una década. Marcó el gol del triunfo ante ESPAÑA en Cuartos de Final de aquel certamen celebrado en suelo turco. Hasta el momento no ha tenido chances en la selección absoluta, a pesar de llegar a la cifra de casi 300 partidos en Europa. Su estadía más larga fue en el Ternana Calcio de ITALIA, jugando 141 encuentros y marcando 33 goles. También tuvo un pasaje por el Bolonia y gran parte de su carrera la ha desarrollado en BÉLGICA, en equipos como el Standard de Lieja, Royal Amberes, Union SG y Beerschot. Actualmente se desempeña en el KV Kortrijk.

Thiago Borbas (21 años – Red Bull Bragantino)

Luego de casi 100 partidos en el Club Atlético River Plate, Thiago Borbas pegó el salto al fútbol brasileño, incorporándose al Bragantino, elenco gestionado por la firma Red Bull y que ya ha contratado a otros futbolistas uruguayos como Emiliano Martínez e Ignacio Laquintana. Es un delantero que tiene mucho por crecer y que habrá que observar en el Brasileirao, torneo que recién comenzó. De todas formas, Borbas ya ha anotado dos goles en el Campeonato Paulista y también tuvo minutos en la Copa Sudamericana, a la cual esta escuadra llegó a la final en el año 2021.

Miguel Merentiel (27 años – Boca Juniors)

Este jugador nacido en Paysandú tuvo su momento más alto en el club Defensa y Justicia, con el cual ganó la Copa Sudamericana 2020 y la Recopa Sudamericana 2021. En el elenco auriverde marcó 27 goles en 79 juegos, para posteriormente ser vendido al Palmeiras, que lo cedió a Boca Juniors en la presente temporada. Asimismo, tuvo un pasaje por el fútbol español, defendiendo al Lorca FC y al Valencia Mestalla, filial del club principal. No ha sido considerado por los entrenadores que han estado a cargo de URUGUAY, pero si se afianza como centro-delantero xeneize la oportunidad podría llegar.

El Indio

Su garra, el cabello largo y azabache, sus facciones similares a nuestros Charrúas, le dieron origen al sobrenombre que llevará toda su vida, aunque con el tiempo haya cambiado su “look”.

Luis Enrique Malvárez Portillo, es su nombre completo, pero es más conocido por la hinchada danubiana simplemente como el “Indio” Malvarez.

Fue un jugador diferente con técnica, fuerza y un temperamento que salía de lo común, que lo catapultó a la categoría de ídolo.

Nacido en 1960 en el barrio Jardines del Hipódromo, lo llevaron a vestir, primero, los colores albiverdes del club “Primavera” de Baby Fútbol, para luego dar el salto e ingresar en las divisiones juveniles de Danubio.

Un hombre que sin dudas puso todo de sí, dentro y fuera de la cancha, para llegar… tal vez por eso triunfó. Sus grandes condiciones lo hicieron debutar en Primera división con solo 16 años en 1976, aunque se afirmó como titular, tres años después.

En 1977, como suplente, pero ingresando con asiduidad se consagró campeón del cuadrangular “Hugo Forno” y tres años después fue pilar fundamental en la obtención del vicecampeonato en el Torneo República.

Continuó la escuela de los Urbano Rivera, Tomás Rolan y el “Chico” Moreira, que es lo mismo que decir, de grandes laterales derechos, “jases” para los más veteranos, que dio Danubio al fútbol uruguayo.

Como sus antecesores llegó a la Selección Mayor uruguaya en el año 1980.

La exótica Corea del Sur, también disfrutó de sus virtudes allá por 1981, cuando Danubio participó de la Copa Presidente y obtuvo el 4° puesto.

En 1982, fue transferido a Estudiantes de La Plata, equipo donde jugó 5 años hasta que fue vendido a San Lorenzo de Almagro; posteriormente defendió a Argentinos Juniors y Gimnasia y Esgrima de La Plata.

Nos quedará por siempre el recuerdo de aquel partido en Jardines frente a Peñarol, en que el árbitro debió detenerlo, para que el “Indio” fuera atendido, ya que él no quería salir, pese a sangrar abundantemente de sus fosas nasales, por recibir un codazo de un rival.

Tuvimos la suerte de verlo jugar, pero nos sentimos mucho más afortunados por haberlo conocido personalmente porque es un gran ser humano.

El “Indio” puso siempre todo de sí, dentro y fuera de la cancha, por eso, simplemente por eso…. triunfó en la vida.

El Guaito

Washington Victoriano Manghini fue un notable futbolista, dueño de una excelsa jerarquía. Quienes lo vieron jugar, jamás lo olvidaron. Sin dudas, está entre los mejores jugadores danubianos de la historia.

“Guaito” o “Waito” tal su apodo, seguramente derivado de una deformación de Washington, debutó en el equipo principal de Danubio en 1953, que era dirigido por Alejandro Morales.

Al año, ya se consagraba subcampeón del Campeonato Uruguayo de la “A”, integrando un equipo fenomenal que logró desplazar a uno de los equipos “grandes”, lo cual, por aquellos tiempos era hazañoso. Dirigido por “Nino” Corazo, el “cuadro” habitualmente formaba así: Maceiras en el arco, Correa, Argenti; Urbano Rivera, Lezcano y Manghini; Auscarriga, Romero, Burgueño, Bentancor y la “Gata” Martínez. También ingresaban “Pelo” Rodríguez y Melgarejo.

Este segundo puesto fue el premio al esfuerzo y la calidad del plantel, que aún jugaba como local en el Parque Forno, todavía no se había construido el Estadio Jardines del Hipódromo – María Mincheff de Lazaroff. 

En 1955, integró la delegación de la franja que participó de una inolvidable gira por varios países de Centroamérica y México, que duró más de dos meses y en la cual disputaron 18 encuentros, de los cuales, ganaron siete, empataron seis, perdiendo los 5 restantes.

Manghini, se entendía a la perfección, con Héctor “Tito” Argenti, quien lo cubría cuando subía por el lateral izquierdo. De aquel formidable Danubio, dicen que “salía del fondo en forma por demás prolija”.

También dijo presente, en la primera gran actuación danubiana en el Torneo Competencia de 1958, cuando consiguieron el vice campeonato. (30 años después Danubio se alzó con el título de campeón)

En las postrimerías de su trayectoria con la franja negra al pecho, colaboró para la obtención del título de Campeón Uruguayo de la “B” de 1960, que posibilitó el retorno de Danubio al círculo de privilegio del fútbol uruguayo, que había descendido el año anterior.

Sus destacadas condiciones lo llevaron a vestir la gloriosa camiseta celeste en dos Campeonatos Sudamericanos, los de 1956 y 1959.

Hugo Bagnulo, fue el que lo hizo debutar en el seleccionado uruguayo, fue para el torneo de 1956, disputado en Montevideo y en el que Uruguay se consagró campeón. Danubio fue el equipo que aportó más futbolistas, a saber: Julio Maceiras, Carlos Correa, Washington V. Manghini, Alfonso Auscarriaga, Fernando Rodríguez y Oscar D. Melgarejo.

Fue convocado nuevamente, esta vez por Juan Carlos Corazo, para disputar el “Sudamericano Extra” de 1959, siendo en la oportunidad el único danubiano en el plantel. El torneo se jugó en Ecuador y Uruguay fue nuevamente campeón.

Washington Manghini, un crack, jugador histórico de Danubio y de Uruguay.

La especialidad de los exNacional: hacerle goles… ¡a Nacional!

Gol agónico de “Seba” Fernández. Se le escapa el Campeonato Uruguayo 2021 a Nacional.

Es curioso: no debe existir club en Uruguay al que más goles le hayan marcado sus exjugadores como Nacional.

La lista puede salir de forma más o menos sencilla, pero, mientras más buceamos, más casos encontramos.

La historia de la institución es más que centenaria, por eso vamos a centrarnos en los ejemplos más relevantes que se han producido de 1980 a la fecha.

El completo detalle, a continuación.

Seguir leyendo…

Tres años en la picota

Entre los años 2010 y 2013 diversas selecciones uruguayas tuvieron una actuación destacada, lo que llevó a la insignia celeste a volver a los primeros planos del balompié internacional, luego de varios años en el ostracismo. En la columna de hoy la propuesta es repasar aquellas performances que, si bien no se cristalizaron con títulos, sí fueron una “bocanada de aire fresco” para nuestro principal deporte.

La travesía por SUDÁFRICA

Este trienio exitoso comienza a mediados de 2010, pero antes de continuar cabe aclarar que, por su rica historia, sabemos muy bien que el éxito para URUGUAY significa la obtención de títulos y trofeos. No obstante, hay que poner las cosas en su debido contexto. Dados los fracasos de fines del siglo XX y de principios del siglo XXI, es que puede considerarse este período como algo productivo, sobre todo por las instancias a las que se llegó. Y, de cierto modo, nos acostumbramos a definir certámenes de categoría mundial prácticamente por cuatro años seguidos. Dicho esto, pasemos al prometido repaso…

URUGUAY llegó con muchas dudas a la Copa del Mundo 2010, tras clasificar por la vía del repechaje intercontinental al vencer a COSTA RICA por un global de 2-1. La llave mundialista no lucía sencilla: estaban FRANCIA (vigente subcampeón del mundo), SUDÁFRICA (elenco anfitrión) y MÉXICO, otro equipo muy competitivo. Luego del debut sin goles ante los galos, empezaron los rumores de que Oscar Washington Tabárez sería reemplazado al cierre del torneo. Nada de esto ocurrió pues las cosas cambiarían radicalmente. La Celeste, con doblete de Diego Forlán, goleó al conjunto sudafricano (3-0) y en el último cotejo del grupo superó con gol de Luis Suárez a La Tri mexicana, en encuentro celebrado en Rustemburgo. De esta forma, los orientales ganaban su serie de manera invicta y sin goles en contra. Como primeros de su zona debieron enfrentarse al segundo del Grupo B, que resultó ser el representativo de COREA DEL SUR.

Con bastante sufrimiento y con una “dopieta” del salteño Suárez, los uruguayos vencían a “Los Guerreros Taeguk” por dos tantos contra uno. En Cuartos de Final llegó el turno de medirse con GHANA, el último sobreviviente del continente africano. Indudablemente se trató de uno de los partidos más emocionantes de la historia de los Mundiales. Sulley Muntari abrió la cuenta sobre el filo del primer tiempo. Diego Forlán lo igualó de tiro libre a los 55 minutos. El tanteador no se movió más y se arribó al alargue. Cuando se extinguía el tiempo extra, el árbitro cobró una falta inexistente. De ese tiro libre nace una jugada increíble con sucesivos rebotes. La pelota iba a ingresar al arco charrúa pero Suárez evitó la conquista atajando el esférico con sus manos. Se sancionó penal y expulsión para el número 9, desatando el delirio de los ghaneses, que tenían una ocasión inmejorable para acceder a Semifinales. Asamoah Gyan, delantero que ya había convertido dos penas máximas en el transcurso del campeonato, se hace cargo de rematar la pena. Sin embargo, esta vez eleva su tiro. El balón se estrella en el caño y culmina la brega. El clasificado se dirime en los penales, donde Fernando Muslera se viste de héroe y Sebastián Abreu ejecuta su locura máxima, al definir “a lo Panenka” en el último tiro. URUGUAY volvía a estar entre los cuatro mejores del mundo luego de 40 años.
En la siguiente instancia, lamentablemente no se pudo sortear el escollo de HOLANDA y, ya con las fuerzas menguadas, perdimos la medalla de bronce ante los alemanes. Igualmente la misión estaba cumplida: La Celeste jugó con hidalguía la contienda mundialista y Diego Forlán se llevó el Balón de Oro como el Mejor Jugador del torneo.

Viento de cola y consagración continental

El cuarto puesto logrado en la Copa del Mundo instauró un ambiente de mucho optimismo y buena energía en torno a la selección mayor. El 8 de junio de 2011, y como parte de la preparación rumbo a la Copa América de ese año, URUGUAY empató con HOLANDA en el Estadio Centenario y la venció por penales, quedándose con la “Copa Confraternidad ANTEL”. Sin saberlo, el elenco comandado por el “Maestro” Tabárez comenzaba una racha que alcanzaría la cifra de 18 encuentros sin conocer la derrota. En ese lapso, URUGUAY obtuvo su Copa América número 15. En su campaña triunfal eliminó por penales a los albicelestes en la ciudad de Santa Fe. Por supuesto, con Lionel Messi y otras figuras en el campo. Después dejó por el camino a PERÚ (2-0) y en la final aplastó a PARAGUAY con dos goles de Diego Forlán y otro (el primero del partido) de Luis Suárez. “El Pistolero” fue condecorado como el Mejor Jugador del evento y Sebastián Coates fue elegido como la revelación juvenil, sustituyendo al lesionado Diego Godín.

También hubieron otros resultados de destaque a lo largo de ese año carente de tropiezos, como la goleada 4 a 0 sobre CHILE por las Eliminatorias rumbo al Mundial 2014. En la noche del 11 de noviembre de 2011 un inspiradísimo Luis Suárez brilló y se llevó todos los aplausos con su póker de goles. A su vez, se rescataron unidades por primera vez en Asunción, un feudo siempre difícil en las clasificatorias. En cuanto a partidos amistosos, hay que señalar que se le ganó a ITALIA (1-0) en el Estadio Olímpico de Roma, además de empatar sin goles con los franceses en Le Havre. Todo este desempeño permitió que la selección escalara al segundo puesto del Ranking FIFA a mediados de 2012, quedando sólo por detrás de ESPAÑA.

Luego de algunos vaivenes, en junio de 2013 se recuperó el semblante en la Copa Confederaciones. Si bien URUGUAY culminó en la cuarta colocación, se hicieron interesantes partidos ante BRASIL e ITALIA, con un Edinson Cavani descollante. Ese impulso sirvió para terminar de buena manera la Eliminatoria y nuevamente clasificar al máximo torneo ecuménico mediante la repesca (5-0 global ante JORDANIA).

Gorriones celestes desfachatados

Las categorías menores fueron las que terminaron de darle forma a este buen momento de URUGUAY en competencias internacionales. El año 2011, además del título de América en tierras argentinas, trajo consigo otras alegrías para nuestro principal deporte. Entre enero y febrero PERÚ acogió el Campeonato Sudamericano Sub 20, donde el equipo dirigido por el Ingeniero Juan Verzeri culminaría segundo. Para una selección ganadora como la charrúa esto no es ningún logro, sin embargo, esa posición determinó que URUGUAY volviera a participar de la disciplina del Fútbol en los Juegos Olímpicos, luego de 84 años. El triunfo clave del Hexagonal Final fue contra ARGENTINA, escuadra a la que se derrotó por 1 a 0 con anotación de Matías Vecino. Al año siguiente la selección Sub 23, reforzada con Egidio Arévalo Ríos, Luis Suárez y Edinson Cavani, concurrió a los Juegos Olímpicos de Londres bajo las órdenes de Oscar W. Tabárez. Desafortunadamente, la representación nacional quedó eliminada en la fase de grupos al caer con SENEGAL (0-2) y GRAN BRETAÑA (0-1). De poco valió el triunfo logrado en el estreno ante los EMIRATOS ÁRABES UNIDOS por 2 a 1.

No obstante, y volviendo al 2011, a mediados de ese año la selección Sub 17 se llevó todas las miradas de nuestra afición futbolera. Tras lograr el vice campeonato en ECUADOR con Juan Cruz Mascia como máximo goleador, el elenco entrenado por Fabián Coito viajó a MÉXICO para la disputa de la Copa del Mundo. Por la fase de grupos, los uruguayos vencieron a CANADÁ y RUANDA (3-0 y 1-0), cayendo en el último match ante INGLATERRA (0-2). En los Octavos de Final el rival fue el CONGO, a quien se lo derrotó con goles de Maximiliano Moreira y Gastón Silva (2-1). Posteriormente la víctima fue UZBEKISTÁN, que sucumbió por 2 a 0. La Semifinal se jugó en Guadalajara, donde esperaba nada más y nada menos que BRASIL. Los chicos celestes jugaron un partidazo y golearon por 3-0 a La Canarinha con tantos de Elbio Álvarez (de penal), Juan Manuel San Martín y Guillermo Méndez.
Por otra parte, MÉXICO, el equipo local, era el otro finalista. Los anfitriones también llegaban al partido decisivo con la moral muy alta, pues habían demostrado gran capacidad de resiliencia en el juego previo frente a los alemanes, que resultó durísimo. El Estadio Azteca, con casi 100.000 almas, esperaba por la consagración de sus jóvenes. Los visitantes tuvieron sus buenas chances en los pies de Elbio Álvarez, que estrelló un remate en el palo, pero los mexicanos fueron más efectivos y ganaron con tantos del capitán Antonio Briseño y otro de Giovani Casillas, ya sobre el término del match.

En aquel equipo uruguayo se destacaron el arquero Mathías Cubero (premiado con el Guante de Oro como mejor portero), Emiliano Velázquez, Gastón Silva, Leonardo Pais, Elbio Álvarez, Guillermo Méndez, Jim Morrison Varela, Rodrigo Aguirre y Juan Manuel San Martín, entre otros. Gran parte de esta generación volvería a instalarse en una final mundialista, dos años más tarde.

Epopeya en TURQUÍA

En el año 2013 la selección Sub 20 consiguió el tercer puesto en el torneo sudamericano que se desarrolló en ARGENTINA, clasificando de esta manera a la Copa Mundial que organizó la federación turca. La Celeste integró el Grupo F, perdiendo en el debut con CROACIA, que ganó con tanto de Ante Rebic. Esta categoría, como sucediera en el año 2011, seguía bajo la conducción de Juan Verzeri y logró recuperarse con sendas victorias ante NUEVA ZELANDA y UZBEKISTÁN (2-0 y 4-0 respectivamente). En Octavos de Final apareció NIGERIA en el camino. Los africanos ofrecieron gran resistencia, sin embargo, URUGUAY se impuso con dos tantos de Nicolás “El Diente” López (el segundo de ellos “picando” un tiro penal).

ESPAÑA era uno de los elencos más completos del referido certamen y fue el contrincante en la siguiente de fase. El juego se definió a favor de los sudamericanos con un cabezazo de Felipe Avenatti a los 103 minutos de la prórroga. Ya instalados en Semifinales, fue el turno de medirse con IRAK, equipo que venía de disputar dos alargues ante PARAGUAY y COREA DEL SUR. Nuevamente el cotejo no se pudo dirimir en los 90 minutos. Alí Adnan Kadhim abrió la cuenta a los 34′, empatando el score Gonzalo Bueno a los 87′. Hubo que recurrir a la serie de penales, donde los gorriones ganaron por 7 a 6.
Del otro lado del trayecto apareció FRANCIA, que tenía jugadores como el golero Alphonse Areola, Mouhamadou Sarr, Paul Pogba, Geoffrey Kondogbia, Jordan Veretout, Yaya Sanogo y Florian Thauvin. El partido fue bastante trabado y cerrado. Nicolás López y Felipe Avenatti dispusieron de algunas ocasiones que fueron bien conjuradas por el guardametas francés, en tanto Guillermo De Amores también tuvo intervenciones destacadas.
El título se definió desde los once metros y “Les Bleus” estuvieron perfectos, anotando cuatro tiros. Por URUGUAY solo pudo convertir Lucas Olaza, por lo tanto, FRANCIA se quedó con la gloria. Los juveniles charrúas debieron conformarse con la medalla de plata y dos futbolistas recibieron distinciones individuales: Guillermo De Amores obtuvo el Guante de Oro y Nicolás López el Balón de Plata. Otros jugadores que sobresalieron en dicho Mundial fueron Gastón Silva, José María Giménez, Sebastián Cristóforo, Diego Laxalt, Guillermo Varela, Giorgian De Arrascaeta y Diego Rolan.

Resumiendo

En suma, URUGUAY volvió a estar en las primeras planas internacionales primero con el cuarto puesto logrado en SUDÁFRICA 2010, el cual dio impulso a la selección mayor para conseguir un nuevo título de América un año más tarde, alzando la Copa en el Monumental de Núñez. Por su parte, los juveniles acariciaron dos títulos mundiales en los años 2011 y 2013, cuando la Sub 17 y la Sub 20 se instalaron respectivamente en las finales de los Campeonatos Mundiales que jugaron. En aquel momento nos ilusionamos con volver a dar vueltas olímpicas y reinar en el planeta, aunque sea en el ámbito juvenil. Pero lamentablemente el sueño no se pudo cristalizar.

Como cierre de esta nota dejamos un último repaso el cual refiere a las alineaciones charrúas que disputaron las finales mencionadas y los premios recibidos en el período de referencia:

*Final de la Copa América – ARGENTINA 2011
*URUGUAY 3 – PARAGUAY 0
*Formación de URUGUAY: Fernando Muslera; Maximiliano Pereira, Diego Lugano, Sebastián Coates y Martín Cáceres (Diego Godín); Egidio Arévalo Ríos, Diego Pérez (Sebastián Eguren), Álvaro González y Álvaro Pereira (Edinson Cavani); Diego Forlán y Luis Suárez.
*Goles: Luis Suárez, Diego Forlán 2 (URU).

*Final de la Copa Mundial Sub 17 – MÉXICO 2011
*MÉXICO 2 – URUGUAY 0
*Formación de URUGUAY: Mathías Cubero; Alejandro Furia, Emiliano Velázquez, Gastón Silva y Maximiliano Moreira (Sebastián Canobra); Gianni Rodríguez, Jim Morrison Varela, Leonardo Pais; Elbio Álvarez, Guillermo Méndez (Santiago Charamoni) y Rodrigo Aguirre (Juan Manuel San Martín).
*Goles: Antonio Briseño y Giovani Casillas (MEX).

*Final de la Copa Mundial Sub 20 – TURQUÍA 2013
*FRANCIA 0 (4) – URUGUAY 0 (1)
*Formación de URUGUAY: Guillermo De Amores; Gianni Rodríguez (Lucas Olaza), Emiliano Velázquez, Gastón Silva y José María Giménez (Guillermo Varela); Federico Gino, Sebastián Cristóforo, Diego Laxalt (Giorgian De Arrascaeta) y Leonardo Pais; Nicolás López y Felipe Avenatti.

Distinciones individuales e hitos

*Copa del Mundo SUDÁFRICA 2010: Diego Forlán (Balón de Oro) y distinción al Mejor Gol del Torneo (el 2-1 sobre ALEMANIA marcado en el partido por el Tercer Puesto).
*Copa América ARGENTINA 2011: Luis Suárez (Mejor Jugador del Torneo), Sebastián Coates (Mejor Jugador Juvenil). Además, la selección uruguaya recibió el premio “Fair Play” al ser la que mejor practicó el juego limpio.
*Mejor posicionamiento en el Ranking FIFA: 2° puesto (2012).
*Copa del Mundo Sub 17 MÉXICO 2011: Mathías Cubero (Guante de Oro).
*Copa del Mundo Sub 20 TURQUÍA 2013: Guillermo De Amores (Guante de Oro), Nicolás López (Balón de Plata).